El poder de nuestra mente... Y mi cazadora. Cap 13

Pues que mas da...
Este es la ultima entrada de este día, y que mejor que el encuentro tan deseado, ya por fin llegan a Kyoto...
Este capitulo no lo pensé mucho, simplemente surgió, aun tenia dudas de como iba a encontrar a la cazadora y a la gobernante...
Y esta fue la forma...

Como siempre, personajes no me pertenecen 


Capitulo 13
Encuentro inesperado

Esta tarde está tranquila, así como las demás, quizás Mai se equivocó y tenía uno de esos delirios o quería una excusa para venirse a Kyoto antes de lo planeado, pero no es una buena razón, además, Mai y Mikoto no mienten, por qué deberían?, pero es que francamente encuentro un tanto ridículo la idea de que tres psíquicos estén cazándonos. Y de igual manera explicaría el por qué no me he podido comunicar con ninguna de las demás. Además la cara de pánico de Mai no puede ser inventada…

Flash back…

-Cálmate, Mai, cuéntame de nuevo como ha sido todo- decía una oji verde a su amiga

-Ya te lo he dicho! Todo es verdad!- Trataba de hacer que Natsuki le creyera, exhausta de todo lo ocurrido…

-Repítemelo, así me hago a la idea…-

-Que necia eres, la verdad…Fue algo así…

Estaba saliendo de mi trabajo e iba a casa para preparar la cena, ya que Mikoto me insistía que quería Ramen, de nuevo, pase por algunas cosas a la tienda ya que no las tenía. Venia sintiendo extraño, sabes, como las veces en que sabes te siguen pero no ves nada, solo es el presentimiento.

Bueno, llegué a un callejón, por tratar de llegar antes, tomé ese atajo, eran cerca de las 8 de la noche, y no escuchaba, apenas veía algo. Luego de la nada vi cómo se acercaba una figura, yo pensaba que solo estaba de paso, al igual que  yo, intentaba acortar camino. Esa figura a unos cuantos pasos de mí, se detuvo, dijo algo como “está muy solo aquí afuera, solo están las criaturas de la noche, y las que se acomodan a la hora sin temor” luego siguió caminando pasando de largo de mi lado, yo entendí eso como “Apresúrate Mai” y comencé a correr. Ya cerca de la salida de ese callejón siento una presión y dolor en mi cabeza, rápidamente, le mande un mensaje del problema que podía ser a Mikoto, confiaba en que me encontaria, y fui atacada.

Una mujer alta, pero no puedo decirte como era exactamente su físico, solo que tenía ojos rojos, se acercó e hizo más fuerte mi dolor de cabeza, y lo supe, sabía que había caído ante un psíquico…

Es tan terrible el dolor, puedes sentir todos tus recuerdos, sueños y pesadillas aparecer frente a ti, no sé qué andaba buscando en mi mente, pero cada vez que lo hacía,  me dolía aún más la cabeza, hasta el punto de estar de rodillas gritando de dolor, podía sentir como iba perdiendo el conocimiento, perdía la conciencia de donde estaba y pensaba en que me haría trizas ahí mismo.

Hasta que pude sentir como se detuvo, algo la había distraído de su trabajo, y es que vi a Mikoto acercarse, la mujer retrocedió sorprendida, tal vez no quería que las 2 estuviéramos juntas, de la nada volvió a aparecer otro psíquico, y otro más, para detenerla, pero logré ver que Mikoto si llevaba puesto el casco así que sus ataques mentales no funcionaban, de alguna forma que admiro, logró llegar hasta donde yo estaba, no hizo nada en contra de la mujer, y ella no hizo nada contra nosotras. No le tenía miedo, y claro que Mikoto tampoco,  sentía el ambiente más espeso y pesado, por eso me tuve que ayudar de Mikoto. Luego, logré ver una sonrisa, de satisfacción, tal vez pensó que seriamos un reto más fácil, así que articulé una frase que me sorprendió al estar en esa posición desventajosa “No sé quién rayos eres, pero no dejaré que sigas con todo esto, así que deja que me pueda defender y no te decepcionaré de la batalla que tendremos”, yo sabía que era una propuesta descabellada y casi impensable, pero al menos podría dar pelea. Ella sonreía, esas sonrisas que en la noche te dan miedo porque sabes que no traen nada bueno, y habló “Ara, que oferta más tentadora, pero la mejoraré. No he sacado nada de tu mente, solo quería aturdirte, no te quiero muerta, lo que quiero es que regreses a Kyoto, y busques a esa tal Natsuki, para que la prevengas de mí, porque voy tras de ustedes… Así que vete, ahora!”. Quedé sorprendida, como es que sabía de tu existencia? Sabe entonces de tu condición? Me aterré que solo salí corriendo de la mano de Mikoto y venir a Kyoto por la noche, no sabes el caos que es hacerlo a esa hora. 

Por eso Natsuki, estamos aquí, necesitamos un plan, no quiero que nos encuentre si no estamos listas…

-Lo que dices Mai es ciertamente descabellado, pero si es cierto será mejor estar preparadas…

Fin del flash back….

Y Mai se ha quedado en mi casa, junto a Mikoto, que al parecer la situación no le parece tan fuera de lugar, claro que recibir una tortura como lo hizo, es bastante malo. Nuestro plan era que se quedara en casa, lo más seguro es que fuera tras ella de nuevo por que logró localizarla en Osaka y quiere la ubicación de mi morada, que por suerte está protegida contra ellos, un pequeño regalo de nuestro proveedor de armas, mientras que yo mantengo cerca de mí el casco por si lo fuera a necesitar, y un tipo de alerta, los psíquicos tienen el aura más pesada por todo el poder que emanan y con este aparato podré prevenirme antes, claro, si no hubiera sido tan idiota y lo dejara en el apartamento, rayos! A veces me paso, tengo que confiar en mis habilidades. Aunque no emanan ningún olor característico, tal vez logre identificarlos a tiempo.

Voy de salida de mi trabajo, ya que el plazo que Yamada me dio antes de tomar mis vacaciones se cumple hasta la semana siguiente, he tenido que hacer trabajos dobles y así adelantar, aunque fuese por un par de días, nuestra partida.
Siendo Kyoto el lugar en donde he vivido por mucho tiempo, sé también que aquellos psíquicos tienen su origen aquí, sería un encuentro bastante parejo a mi parecer. Pero sin Mai y Mikoto conmigo sería difícil, ya que por Mai, ellos no eran simples, no torturaban por diversión o apuestas, ellos estaban en busca de algo o más bien de alguien, de todas las cazadoras…

Y luego…

Un golpe…

Un choque…

Un tropiezo…

Un encuentro…

Sin darme cuenta, terminé en el suelo de un callejón, cerca de algunos locales de comida, de pequeños locales,( calles de parís, con los cafés, florerías y sujetos en bicicleta por la acera, en una tarde tranquila, así me lo imaginé, debe ser por la canción que escucho…). No me di cuenta de su presencia, y menos de que la tenía justo debajo de mí, una mujer alta, de cabello castaño y ojos rojos, que me dejó sin aliento al solo verla, que perdí el tiempo en apreciarla. Al estar encima de ella, cerró los ojos, instintivamente, luego yo enrojecí, porque sabía que le incomodaba la situación, pero es que su olor era tan dulce que no podía separarme. Luego volvió a abrir los ojos, me miró fijamente, aumentando su respiración, pidiéndome que…

-A…Ara! Parece que.. Tenemos un pequeño problema…- me dijo, tratando de que le pusiera atención, por que seguía perdida en mi mente-

-Aja…Yo…Etto-  mis dos brazos a los lados de su cabeza, sus piernas entre las mías, y su afirmación hizo que reaccionara, de que eso, no estaba bien…- Yo perdón!!! No quería!!!- grité de inmediato, que estúpida me debí de ver…

-Fu, fu, fu… No te preocupes, que yo igual no me fijé…- me contestó, sabía que el acento de aquí era único, y que ya me había acostumbrado, pero escucharlo de ella, era como si me hablase un ángel…­- Que tal si, te levantas y te invito a tomar café (Jummm, siempre es café, no lo puedo evitar, me encanta esa bebida amarga y sin casi nada de azúcar, es lo mejor!!!)- me dijo, pidiéndome, amablemente que me quitase de encima de ella, pero que idiota soy!

-OI! Otra vez perdón, no quería… Incomodarte…- me disculpé de nuevo, como si todas las demás veces no hubieran bastado,  y aparte que lo hago mal…

-Ven, acompáñame a tomar algo- se levantó del suelo, y yo la imite, así como la seguí… Como si de un hechizo se tratara… O es que quizás! Ya que unos ojos así no se ven en personas normales…

-Tu… Tu quien eres?…- pregunté tratando de detenerla y que no estuviese haciendo una estupidez, y tratando de no ser tan reveladora con mi acusación- Es decir, normalmente no se le ofrece a un extraño, con el que acabas de chocar, algo de tomar- le dije para aclarar la situación.

-Es cierto, no se la ofreces, a menos que fuera en parte tu culpa, además….- WTF!! O-o acaba inspeccionar mi físico o solo estoy enloqueciendo?- … Fu, fu, fu…- mierda, si lo hizo!!! Y eso me tomó tan desprevenida que me he quedado en Shock!- hay una cafetería cerca que me gusta frecuentar-  volvía a decir para pasar el pequeño detalle de su inspección realizada hacia mi persona…

-Oi…-No tenía nada coherente que decir, así que eso era lo único que pude decir…

La seguí, y ella notó mi casco, suerte que parecía ser que tenía una motocicleta, eso me ayuda más a mi imagen… Y claro, también a evitar que me suceda algún  tipo altercado con la especie que odio…

Entramos a la cafetería que decía, un estilo muy sencillo, pero moderno, de ese minimalista que ahora suelen ocupar en sus diseños los arquitectos (que si lo sabré yo) y tranquilo, podía apreciar de una vista bastante agradable a una plaza cercana, y como si leyera mi mente, o puede que si lo haga, escogió la mesa que tenía esa vista, especial.

-Me gusta este lugar, en especial esta mesa, puedo ver todo desde aquí  y puedo estar más tranquila en cualquier situación-  me decía animándome a sentarme con ella. Mientras seguía pensando en lo linda que era, y que la situación parecía irreal

-Es realmente una vista hermosa-no me refería exactamente a la plaza con todo el esplendor tradicional de Kyoto

-Me alegra que te guste apreciar este lugar-  me dijo sonriendo ampliamente…

-Ah?... Ah!...Si, también es lindo todo lo demás-  BOOM! Un truco tan viejo, pero que al mismo tiempo es tan efectivo, porque ahora la que enrojeció fue ella…

-Gra…Gracias, muy lindo de tu parte- tómalo como una venganza de la inspección que me realizaste hace un momento. Sonriéndole por la situación, nunca me había visto envuelta en este tipo de filtreo, tan descarado, pero tan discreto al mismo tiempo…

-Es la verdad. Una preciosa vista- Mis ojos no se los quitaba de encima, antes no me hubiera atrevido a decir semejante cosa, pero viendo que ella fue la primera en iniciarlo, yo solo me dejé llevar-

-Fu, fu, que tierna, te parece si pedimos algo?- Así como me hizo alucinar, me bajó de la nube en la que me encontraba. Como que tierna? No estaba en ese plan!!!

-Ahora que lo pienso, nuestro pequeño accidente, fue culpa mía también, así que también debo invitarte a algo- caballerosidad ante todo…

-Qué te parece si hacemos esto… Yo te invito esta vez, y la próxima me invitas tu- sonreí aún más, estábamos acordando tener otro encuentro como este, bien, no estoy tan perdida en esto.

-Me parece bien, yo seré la que invite la siguiente ocasión…­- y con eso dicho, apareció una camarera para pedir nuestra orden. Tan rápido como se fue, regresó con nuestros pedidos, a veces creo que hacen magia.- Y bien?- le pregunte al tomar un sorbo de mi café…

-Bien qué?- me pregunto curiosa al hacer lo mismo con su té.

-No me piensas decir cómo te llamas?-  pequeño detalle, el nombre, habíamos estado conversando animadamente y se nos había olvidado presentarnos…

-Fu, fu, perdón, me desubique un poco- pues yo bastante al verte, sabia de la existencia de ángeles, pero como es que le permitieron venir y peor, estar conversando conmigo(Galán de novela)- Me dirás el tuyo primero?- me cuestionó, y yo solo hice una cara de “debes estar bromeando”

-Yo pregunté primero-

-Y yo pregunté segundo-  me decía como si no importara el orden

-Yo debo saberlo antes-

-Por qué?- está jugando conmigo…

-Porque si, te dije que pregunté primero…

-Te lo diré entonces…­- bien!- Si me dices cual es el tuyo primero…­- AH! Vamos!

-No, yo pregunté primero, así que debo de saber tu nombre primero

-Bien, tu ganas, te lo diré…-SI!, victoria!- Si antes me complaces con algo…

-Eso es trampa sabes- porque me imaginé que esto sería más fácil?­- Qué es lo que deseas?- pregunté curiosa.

-Ummm, quiero… Un beso tuyo…-Q...Qué? como no tuvo nada de pena en pedirme algo así, y soy yo la avergonzada por tal propuesta…- Dime lo harás?- su sonrisa parecía de victoria, sabía que no la iba a besar porque apenas si la conocía, era todo una trampa-

-Yo… Creo que…Si lo hago, me lo dirás primero?-no cambiaba su sonrisa, estaba segura de que al final me arrepentiría…

-Claro, te dije que así seria, me mantengo firme con eso- pues, si caí con esta trampa, entonces le daré vuelta a su grandioso plan…

Estando en una mesa para dos, ella en frente mío, me levante de mi asiento, apenas, para alcanzar su rostro, puse mis manos en el, y tenía pánico, estaba pensando en retirarme de esa peligrosa jugada, pero noté que nunca cambio su sonrisa de victoria, como si ya supiera todo esto de ante mano, lo siento linda, pero no conoces como soy. De nueva cuenta me armé de valor y le planté un beso,  algo simple, solo era un beso, o lo seria si no fuera porque tenía un sabor increíblemente exquisito en los labios, nunca pensé que el té de Jazmín tuviera ese sabor tan… agh, inexplicable, que me hacía querer más y más de sus labios, y no dejaba que se separara de mí, como si ella tampoco lo quisiera, mis movimientos se hacían mas rápidos, pero trataba de pausarlos lo más que podía, no quería que se perdieran, quería seguir degustando su sabor, había tiempo para hacerlo, lo sabía, pero me volvía alterar los sentidos ese sabor y caía de nuevo en la rapidez de mis movimientos, hasta que sentí un fuerte golpe de aire caliente en mi boca, esto se estaba elevando demasiado y contra todas las ganas del universo, me separé lentamente, pero dejando marcado mis dientes en su labio inferior, para luego relamerlo y poder soltarlo. En un movimiento lento, abrí mis ojos, para verla, y es que se veía aún más hermosa, acercándose de nuevo, no queriendo que abandonara nuestro contacto, pero había otra cosa que quería saber, y solo le dejé pequeños y rápidos besos para que entendiera lo que quería decir. Así fue como gané. Gané más que un pequeño trato, un sentimiento tan fuerte ese día.

-Tu… Realmente no creí que fueras a hacerlo…- vi como paso su lengua por su labio inferior, y yo quería atraparla antes de que regresara a su escondite, quería seguir probando…

-No me subestimes.-no perdía de vista el movimiento que hacía de su boca…

-No lo volveré a hacer, créeme-  dijo en un suspiro, perdido, lo último…

-Bien… Entonces… Dime, Cual es tu nombre?, o prefieres que te diga, ángel de ojos rojos?- qué?, acababa de besar a la mujer, aún estaba soñando con su sabor, como poder resistirse a tirar tales halagos?

-Me encantaría que me llamaras así- me sonrió acercándome el rostro, estaba tentándome demasiado…

­-Pero quiero saber el nombre de ese ángel…- yo también acerque mi rostro al de ella, y estábamos tan cerca, que podía sentir como me le tiraba encima, de nuevo, a esos labios.

-Bien, te lo diré- regresó a su posición inicial…-me llamo Shizuru, solo llámame Shizuru…- hermoso, realmente hermoso…-

-Bonito nombre, me parece propio de ti…­- creo que estoy perdiendo la confianza en mí…

-Ahora dime el tuyo-cuando dijo eso, se me vino a la mente algo, ella tiene los ojos rojos, es alta y según sé, la que está detrás de mí sabe que me llamo Natsuki, así que si se da cuenta que la estoy engañando, o es una gran receptora de mentira en las personas, o es ella la que esta tras de mi…

-Natalia, me llamo Natalia, vengo de otro continente por eso es que mi nombre no va de acuerdo al país- a ver qué sucede…

-Me parece también un bonito nombre Nat, si es que puedo llamarte así- me preguntó jugueteando la situación, de nuevo…

-Me parece bien, ya tienes una forma de llamarme, Shi-zu-ru… (No solo Shizuru puede usar ese acento para llamar a Natsuki, he aquí este ejemplo!)- me aventuré a pronunciar su nombre, y me encantaba cada vez más.

-Me gusta cómo suena- volvió a sonreír.- Dime, haces esto a menudo?

-Qué cosa?-  me entró la duda, a que rayos se refería?

-A seducir extrañas para robarles besos y tener algo que hacer más tarde- mi cara de consternación fue más que clara, creía que era como un “Don Juan” , que mierda es eso!

-Si, a decir verdad me entretengo con los extranjeros, más que todo, porque no saben de este lugar y que hay una devora mujeres por aquí- le seguí el juego, pero ya más seria, realmente creía que pudiera hacer algo así? Bueno, no es que nos conociéramos, en ningún sentido, pero es que yo no soy así…

-Vaya! No te imaginé así, realmente me sorprendes- dijo bastante sorprendida y creo que la vi desilusionada por que trato de taparlo hablando lo más rápido que pudo

-No, realmente, no lo hago, pero me molestó que preguntaras eso. No es que vaya tropezándome con cualquiera y que me inviten a tomar algo, para que les termine sacando su nombre con… Con un beso- le expliqué lo que realmente había ocurrido. E inmediatamente me volvió a sonreír…

-Que… alivio…-me volvía a consternar, que era lo que esta mujer quería?

El resto de la tarde/noche, la pasamos hablando de otras cosas, más superficiales, ninguna quería revelar mucho, pero nuestra conversación era bastante animada, no era para nada aburrida  y era simpática, amable y abierta, lo suficiente, es que me había encantado esta mujer. Así que el amor a primera vista si existe.

Cuando ya se nos hacía ya más noche, me ofrecí a llevarla, como tenía el casco y evidentemente andaba en el carro de oficial tuve que inventarle que había dejado la moto en reparación, y que por eso andaba cargando solo el casco. Subió al auto y la fui a dejar a una casa que por fuera lucia muy elegante y bastante tradicional.

-Bueno Nat, ha sido una tarde bastante emocionante y entretenida, espero volver a verte porque me debes la invitación- me decía mientras se quitaba el cinturón de seguridad.

-Espero repetirlo pronto ángel…- se volvió a sonrojar y se mordía el labio inferior, sabía que quería tanto como yo, seguir lo que dejamos en el café…

-Entonces, nos… Vemos luego- se acercaba para despedirse con un beso en la mejilla…

Pero yo fui más rápida, en un movimiento, volví a atrapar sus labios, esta vez dejaba surgir todo el deseo de besarla, aunque estuviéramos en un auto, la atraje como pude a mí para abrazarla mejor, y ella sostenía mi cuello para no soltarme. Mis labios avanzaban rápidamente por su boca, recorría su interior, jugando, y quien llevaba ventaja era yo, besos desesperados se hacían cada vez más presentes, el ambiente comenzaba a calentarse bastante rápido, la necesidad se acrecentaba con cada roce de labios, y que ahora también una necesidad de toda la  piel, me imaginaba lo cálida que podía ser, hasta que nos separamos  abruptamente por lo agitada que estábamos ambas, el lugar no era el adecuado, la ropa estorbaba, las miradas hablaban y contaban lo que necesitábamos, porque ninguna era capaz de pronunciar palabra, ya que si lo hacia una de la otra la callaría a besos de nuevo, y con la respiración fuera de control, no dijimos nada más.

Shizuru se bajó del auto, la vi pasar en frente de este, caminaba con un movimiento de caderas que podría matar, se acercó a la ventanilla del conductor y me indicó que le abriera, cosa que lo hice rápidamente, me tomó del cuello para salir, cerró de golpe la puerta y me volvió a besar, ahora con más espacio para poder sentirnos. Estando acorralada por esa mujer, me dejé dominar por completo, la tenia de nuevo entre mis piernas, sus piernas, apretando cada vez más, haciendo que mi imaginación se desatara y preguntándome como seria ella, que tan pronto como lo hice, volvió a tomarme por el cuello de la camisa y me dirigió al interior de su gran casa/mansión, caminando a tropezones por toda la sala, subir un puñado de gradas, que en más de una ocasión estuve en peligro de caer, recorrer un gran pasillo y entrar a una habitación, y en todo ese lapso sin despegar nuestros labios una de la otra, porque el deseo dominaba esa noche, así fue como terminé tumbada en la gran cama y haciendo a la propietaria de esta, suspirar rápidamente, sacándole gemidos, suplicas, en las que me pedía que le quitara la ropa, que le besara el cuerpo y que, la hiciera mía.

Y así lo hice, cuando ya por fin logré deshacerme del estorbo que era la ropa, al sentir el contacto de nuestra piel, de su tersa, blanca, y cálida piel, me enloquecí aún más, deseaba probarla más y más, que la bañe de besos, mientras que ella me daba el espacio para poder hacerlo, disfrutaba de la pasión pero también de las caricia que le proporcionaba y yo de cada suspiro que le arrancaba, eso hacia mi noche. La hice mía, me hizo suya, el sudor en su cuerpo se veía de por si exquisito, gritos entregados por ambas, en una búsqueda de placer, mientras que nos sosteníamos mutuamente, completamente abrazadas y sin perder contacto una de la otra, así fue como pasé esa noche y madrugada, entregándonos mutuamente, bien podíamos terminar antes, pero la pasión y ese fuego que teníamos era mucho más alto de lo que pensábamos, solo agradezco de que seamos ambas mujeres y que poseamos la habilidad de sexo infinito, así complacer se vuelve interminable y deseable, y si es con una persona que encuentras por casualidad pero que llena tu corazón, la entrega es total (no solo me refiero a este encuentro), aun si te das cuenta de que no la conoces realmente, pero hay algo que te dice, que sí, que te llena de su ser, para poder ser uno. Porque a pesar de que la acabo de conocer, algo me llama a ella, y como nos demostramos hace algunas horas, sé que es mutuo esto…

......
Continuará

Tenia  unas ganas de hacer a una juguetona Natsuki, que no sé si lo he logrado...También...
No soy buena escribiendo escenas subidas de tono, por lo general escribo el inicio y que pasó al final...
Pero haré el intento mas adelante...
Y ya con el capitulo... Es coincidencia que el capitulo de encuentro entre ambas fuese el aniversario del blog, no crean que lo hice a propósito xD
Con eso aclarado, espero pasen feliz fin de semana, nos leeremos el martes si es posible o hasta el otro viernes...


<Cap 12                                           Cap 14>